Salir a correr en verano y acabar con marcas del sol parece inevitable. Es fácil identificar a un runner en la playa, por las marcas de los pantalones, las gafas, las zapatillas o la camiseta. Quitarlas es casi imposible, pero, si no quieres que sean tan evidentes, presta atención a estos consejos:
1 Corre antes de las diez de la mañana y después de las cinco de la tarde. Podrás evitar el sol en el entrenamiento y las horas de máximo calor, en las que el rendimiento del deportista baja, de manera considerable. La radiación ultravioleta será menor, así que los rayos del sol no tendrán el mismo efecto sobre tu cuerpo que en las horas centrales del día.
2 La ropa. No nos costará mucho encontrar en el mercado ropa técnica de running, con filtros solares, que, además, nos ayude a transpirar bien.
3 Utiliza protector solar. Un protector solar entre factor 25 y factor 80, según el tipo de piel. Te será muy útil a la hora de evitar manchas y proteger tu piel de los peligros de la exposición al sol. No olvides expandirlo bien y de manera uniforme por todas las partes del cuerpo que no tapa tu camiseta.
4 Un protector resistente al agua. Ten en cuenta que vas a sudar, así que debes buscar un protector solar resistente al agua. A medida que sudemos más y nos empecemos a secar el sudor, iremos perdiendo protector, por lo que es recomendable aprovechar los descansos dedicados a estirar o beber agua para ponernos crema otra vez.
5 Autobronceadores. En mayor o menor medida, las marcas siempre estarán ahí, así que podemos utilizar cremas o toallitas bronceadoras para dar algo de color a las partes donde nunca toca el sol.
Y no olvides los peligros de hacer deporte en las horas más calurosas del verano.
Fuente de la imagen Georgie Pauwels
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