En este artículo, el atleta Jaume Albarañez habla de las zapatillas para empezar a correr. No de marcas o modelos, sino de lo que hay que tener en cuenta a la hora de seleccionar unas zapatillas para iniciarse en el mundo del running.
¿Qué material para correr es imprescindible para iniciarse en el running? Puede parecer una pregunta de fácil respuesta para alguien que ya corre. Sin embargo, para alguien que da sus primeros pasos en el running (o en cualquier deporte) es normal tener dudas sobre el material necesario o imprescindible para empezar a entrenar.
Por ello, este tema se ha dividido en tres artículos, para profundizar en cada uno de sus apartados. En esta primera entrega, vas a conocer una serie de consejos para una correcta elección de zapatillas para empezar a correr y en próximos artículos, se abordará el tema de la ropa técnica, los complementos y los gadgets tecnológicos.
Tipo de pisada, determinante para elegir zapatillas para empezar a correr
Seguramente, alguien que se inicia en el mundo del running se va a hacer muchas preguntas en el momento de elegir el material que necesita, pero especialmente cuando llega el momento de elegir las zapatillas para empezar a correr.
¿Son necesarias zapatillas de última generación? ¿Me las compro online o me dejo asesorar en una tienda especializada? ¿Es recomendable invertir en un modelo caro o mejor al principio comprar un modelo «económico»? ¿Invertir en unas buenas zapatillas me ayudará a progresar más rápido? ¿Puedo tener problemas físicos o de salud con una mala elección de zapatillas para empezar a correr
Zapatillas para empezar a correr por tipo de pisada: pronador, supinador o neutro
Cuando una persona toma la decisión de empezar a correr lo habitual es pensar «necesito unas zapatillas». Me gustaría compartir una reflexión que tengo muy presente y repito desde hace muchos años: «Prefiero gastarme 60€, 80€ ó 100€ en unas zapatillas adecuadas y que se ajusten bien a mis necesidades y circunstancias, que 300€ en sesiones de fisio por unas zapatillas inadecuadas».
Con esto no estoy tratando de decir que no haya que gastarse dinero en sesiones de fisio cuando es necesario, no; lo que intento dejar claro es que a la hora de elegir unas zapatillas hay que invertir en unas zapatillas adecuadas y, por adecuadas, no hay que entender «las más caras» o «las más vanguardistas», sino las más convenientes a nuestra pisada, peso, kilómetros semanales, terreno habitual de entrenamiento, técnica de carrera, etc. así evitarás lesiones deportivas.
El tipo de pisada es lo más importante a tener en cuenta en el momento de la elección de las zapatillas para empezar a correr.
Diversos estudios han demostrado que muchas personas terminan sufriendo lesiones por no utilizar las zapatillas adecuadas a su tipo pisada. En algunas tiendas especializadas realizan estudios de la pisada para determinar qué tipo de zapatilla hay que utilizar, lo que puede resultar de mucha ayuda al empezar a correr. El tipo de pisada se puede clasificar en tres grandes grupos:
- Pisada pronadora.
- Pisada supinadora.
- Pisada neutra.
El peso, factor importante para elegir zapatillas
Por otro lado, en función de nuestra composición corporal (peso) utilizaremos unas zapatillas para empezar a correr con más o menos amortiguación. En este apartado voy a dar un consejo que considero útil para la mayoría de personas: para los rodajes suaves o «long runs» (tiradas largas) recomiendo utilizar unas zapatillas con buena amortiguación, independientemente de nuestra composición corporal, para poder realizar muchos kilómetros con la máxima comodidad.
La amortiguación en las zapatillas de running es indispensable para reducir el impacto contra el suelo que se produce al correr, concretamente durante la fase de apoyo de la zancada.
Los sistemas de amortiguación que incluyen la mayoría de zapatillas de running (existen modelos sin amortiguación llamadas ‘minimalistas’ que requieren de una adaptación especial y que no son recomendables para personas que empiezan a correr) tienen como finalidad absorber de forma gradual la fuerza del impacto que se produce contra el suelo y reducir la vibración (la tensión) que recorre todo el cuerpo a través de los músculos y los huesos.
El terreno, zapatillas para empezar a correr ¿asfalto o tierra?
Otro aspecto importante a la hora de elegir unas zapatillas para empezar a correr es el tipo de terreno por el que mayoritariamente se va a correr o a entrenar.
No es lo mismo entrenar sobre asfalto, por sendas de tierra o por bosques. Para correr por una superficie en la que haya tierra suelta que pueda resbalar, necesitaremos unas zapatillas con una suela que nos garantice un buen agarre (unas zapatillas de asfalto pueden ser muy inseguras para correr por caminos de tierra, especialmente a la hora de afrontar bajadas).
El asesoramiento de una tienda especializada puede ser muy valioso
El comercio online nos permite encontrar una oferta inmensa de zapatillas para empezar a correr que se pueden ajustar a nuestras necesidades, pero mi recomendación para quien se inicia en el running (o en cualquier otro deporte) es acudir a una tienda especializada porque normalmente el personal va a ofrecer el asesoramiento convenientemente según la pisada, el peso, el terreno por el que se vaya a correr mayoritariamente, el volumen de kilómetros semanales a realizar…
Y además, es una forma de poder probarse diferentes modelos y tener la seguridad de la correcta elección de la talla adecuada, notar las sensaciones que se tiene con diferentes modelos, comprobar si provocan alguna incomodidad, presión o roce, etc.
Posiblemente, el precio en una tienda física especializada sea algo más alto del que se pueda encontrar en tiendas online, pero hay que entender que se está pagando los conocimientos y el tiempo del vendedor que va a ayudar a la elección de zapatillas para empezar a correr, un calzado que se va a utilizar durante horas y horas de entrenamientos.
La talla: nunca deben quedar ajustadas
Si finalmente la decisión es comprar online, hay que asegurarse de que la talla es la adecuada y en este punto quiero subrayar y recordar que nunca será la misma talla que se utiliza en el calzado de diario, sino como mínimo una talla más porque al correr los pies se hinchan.
Uno de los principales errores que se cometen al empezar a correr es el de utilizar zapatillas demasiado ajustadas que terminan provocando molestias muy desagradables y que pueden incluso dañar las uñas.
¡Ojo! si compras online, las tallas pueden variar según las marcas. No hay que dar por hecho que si en la marca «X» se gasta un número 41, en la marca «Y» también. Es más, a veces incluso en la misma marca puede haber diferencias de tallas según los modelos.
Y para terminar con el tema de las zapatillas, ¿cuándo es conveniente renovarlas? Evidentemente, cuando las zapatillas acumulan un volumen de kilómetros importante empiezan a perder sus cualidades de agarre (por el desgaste de la suela) y de amortiguación. Si la suela de nuestras zapatillas de correr está desgastada, podemos vernos en una situación comprometida por falta de agarre.
Según el uso (el volumen de kilómetros semanales), la pisada y el peso de cada persona el desgaste se producirá con mayor o menor rapidez, pero sí considero importante advertir de que unas zapatillas con la suela desgastada o con alguna deformación por exceso de uso no son adecuadas para entrenamientos regulares.
Texto para 42K de:
Jaume Albaráñez
Preparador físico
Atleta del equipo CD Metaesport. Cursa estudios de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte en la Universitat de València.
Jaume Albaráñez, preparador físico
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